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Entrevista a Ascensión Mar Bielva

Entrevista a Ascensión Mar Bielva

1 Dic 2025

Entrevistas a emprendedoras y empresarias

«Las mujeres somos especialistas en romper barreras»

Ascensión Mar Bielva lleva adelante Láurea Ecocasona, un eco retiro cultural situado en Oreña, la costa de Cantabria. Fruto de un proyecto familiar que la trajo de vuelta al mundo rural, con una visión clara del potencial de su tierra. El proyecto consiste en la rehabilitación de una casona montañesa para ofrecer apartamentos premium, un gastrobar Km 0 y un espacio activo de exposición cultural y arte. Su inspiración nace de la necesidad de poner en valor la esencia rural y crear un referente de ocio y cultura que evite los desplazamientos a las urbes.

¿Cuál es tu vínculo con el mundo rural? ¿Has vivido siempre en el mundo rural?

Nací y crecí en un barrio de menos de 100 habitantes, en un municipio cántabro de 700 personas: Ruiloba. Mi desarrollo personal y evolución dentro del mundo rural vienen de sentir las dificultades y las pocas accesibilidades dentro de él. Mi desarrollo profesional me llevó hacia diversas capitales, pero con una reafirmación y visión muy clara del lugar del que venía. Algo con un potencial tan fuerte que tenía que intentar compartir y poner en valor su esencia y autenticidad.

¿Qué te motivó a iniciar tu actividad (desplazarte al entorno rural en su caso)?

Cuando me he movido en distintos ámbitos profesionales, recibes los valores y puestas en escena de personas que poseen talentos maravillosos. Pero que por una razón u otra no pueden llegar a desarrollarlos, bien por no encontrar el lugar idóneo o por no ser un camino accesible para proyectarse.

En nuestra olvidadiza pandemia me trasladé a Madrid ante la demanda de personal sanitario, y con la convicción de ser útil ante la dificultad. Allí continué con mi profesión hasta que nuestro proyecto comenzó a materializarse y era necesaria mi presencia a pie de obra en Cantabria, para continuar con lo organizado.

¿En qué consiste tu proyecto? ¿Dónde encontraste la inspiración para desarrollarlo, cómo surgió la idea?

Mi proyecto/realidad consiste en una casona heredada en un núcleo rural, en la que había que tomar decisiones: o bien venderla ante su situación de derrumbe, o rehabilitarla con lo que ello suponía en cuanto a inversión.

Rehabilitamos la casona dando lugar a LÁUREA ECOCASONA, que consta de 6 apartamentos premium, una zona de restauración con alimentos km 0, jardines, patio interior y zona de diversificación cultural: exposiciones, encuentros culturales, música, teatro, talleres, retiros espirituales… dando así cabida a cualquier iniciativa o desarrollo cultural del cual podamos hacer partícipes a las personas interesadas.

¿En qué punto está tu proyecto (empezando, reformulando, es un negocio familiar…)?

Llevamos un año de empresa en funcionamiento, con aprendizajes y puesta en marcha continua. Es un negocio familiar donde la entrega de cada miembro no se cierra a un protocolo establecido, sino a una fuerza y compromiso con raíces muy profundas para seguir saltando obstáculos y reafirmando un proyecto en el que todas las personas que la integramos somos complementos imprescindibles de esta música que es Láurea Ecocasona.

¿Cómo te preparaste para desarrollar tu idea de negocio en el medio rural? ¿A qué servicios acudiste? ¿Te sirvió de apoyo?

Lo cierto es que, no habiéndome dedicado a la restauración y tras tomar esa decisión, me fui todo un verano a trabajar desde dentro de la cocina en el restaurante de un amigo. Creo que fue una de las decisiones más valientes y valiosas que tomé.

Fui elaborando el boceto y las ramas de un tronco que era mi Ecocasona. Presenté el proyecto a NANSA EMPRENDE, un programa que fomenta el emprendimiento y la creación de iniciativas empresariales en el medio rural de Cantabria. Nuestro proyecto quedó entre los finalistas, lo cual nos dio muchos ánimos y emoción por el trabajo desarrollado y por ver nuestras ilusiones familiares materializadas. Fue un magnífico apoyo y una posibilidad de encontrarme con gente con inquietudes parecidas a las mías.

¿Con qué barreras te has encontrado para desarrollarlo? ¿alguna específica por ser mujer? Específicas del medio rural y otras que considere importantes.

Nos encontramos con las peores de las barreras: la guerra de Ucrania y el COVID. Nuestro presupuesto, ya elaborado antes de estas barreras, sufrió unas modificaciones escandalosas. Se triplicó. Eso, añadido a la burocracia en los despachos municipales y regionales a la hora de solicitar informes, visitas, visados, etc.

Y cómo no… la financiación. En los pueblos hay un dicho: “Tanto tienes, tanto vale”.

A los bancos ya les puedes contar que tienes el mejor proyecto del mundo, que si no va acompañado de remanente de tesorería… ¡mal vamos!

No encontré barreras por ser mujer, al menos que yo me diera cuenta. Pero sí que emprender en el medio rural, con un proyecto que va a mejorar la calidad de vida de las personas y crear empleo, no ha sido apoyado como pensé que debería haberlo sido. Aún quedan muchos prejuicios que deberíamos superar.

¿Cuáles son las mujeres referentes que te han inspirado? ¿Alguna relacionada con el medio rural?

Mis referentes de inspiración son las mujeres que, desde que tengo uso de razón, me han rodeado. Esas mujeres que sacaban adelante a sus familias, con fortalezas que muchas veces no correspondían a sus cuerpos menudos, pero con una fuerza interior que las volvía imbatibles.

La mayoría del medio rural: abuelas, madres, vecinas, profesoras, tenderas, ganaderas, comerciantes… todos los oficios representados en una misma mujer. Mi absoluta admiración hacia ellas. En una generación tan precaria y con tanta escasez, ellas cimentaron las columnas para sostener mi generación.

¿Crees que tu sector (producto/servicio) está muy masculinizado?

Son sectores en los que el hombre, en sus inicios, pudo afianzar y elevar la actividad gracias a su formación y competencias, consolidándola como un ámbito de competencia masculina. Pero ahora, afortunadamente, las mujeres hemos llegado para quedarnos y evolucionar el sector desde nuestro propio prisma.

¿El apoyo recibido al desarrollar tu proyecto ha provenido de hombres y mujeres por igual?

No, el apoyo no ha venido de hombres igual que de mujeres. La mujer ha sido más receptiva, incluso creando puntos de vista para añadir al proyecto o maneras de cooperación entre negocios de manera colaborativa o recíproca.

¿Cómo crees que tu proyecto afecta al tejido o la economía de tu comunidad? ¿y qué valor añadido aporta al medio rural?

Nosotras creamos empleo, calidad de vida y, sobre todo, con el apartado cultural queremos ser un referente en el medio rural. Que nos sirva para no tener que desplazarnos a las ciudades para nuestros ratos de ocio y desconexión.

Con ello creamos una línea sostenible evitando desplazamientos a las urbes.

Activamos el consumo de producto local km 0 y con ello mejoramos la línea verde de consumo.

En esencia, mi proyecto es una forma de dar vida al pueblo, conectar a las personas con la tierra, y mostrar que el futuro también puede estar en el campo, si se trabaja con respeto, pasión y autenticidad.

¿Cómo conociste el Programa Desafío Mujer Rural? ¿En qué ha ayudado al desarrollo de tu idea?

Conocí el programa Desafío Mujer Rural a través de las redes, y mis consultas día sí y día también, buscando opciones de mejora y aprendizaje.

Me ha ayudado más de lo que imaginé: poder compartir una idea, un esbozo, y hacer crecer el proyecto con las consultas e intercambio de ideas con más emprendedoras como yo. Ha sido un auténtico descubrimiento al cual le doy todo el valor que merece.

¿Cuáles son tus próximos proyectos?

Mis próximos proyectos son consolidar talleres, cultura, deporte, ocio, encuentros literarios, entre otros, que ayuden un poco a “desestacionalizar” los meses de vacaciones, puentes y demás. Hay que abrir vías de intercambio con otras comunidades y hacerles partícipes de la vida rural en el medio en el que vivimos.

¿Cómo ves tu sector en el medio rural? ¿Qué recomendaciones les harías a las mujeres que quieren emprender en el medio rural?

Debemos ser conscientes de que el turismo mueve nuestra economía, ya que la precariedad industrial de mi zona hace que el turismo ocupe el primer lugar. Pero, desde mi punto de vista, nos falta algo más que unas instalaciones para ofrecer a la clientela: debemos aportar todos los complementos que muestren, a quienes nos visitan, nuestra cultura, hábitos, folclore y oficios que nos ayudaron a enriquecer esta tierra.

Mis recomendaciones, a quienes quieran emprender, son que crean en sí mismas, como mujeres ya somos especialistas en romper barreras y saltar obstáculos. Que busquen sinergias, asociacionismo, que den peso al proyecto y fuerza para derribar los muros de quienes desconfían de nuestra fuerza.

Por último, una frase con la animarías a otras mujeres a emprender en el medio rural.

No hay barrera, cerradura ni cerrojo que puedas imponer a la libertad de mi mente. (Virginia Woolf)

Link a Laúrea Ecocasona